Se trata de un tipo de tarjeta de crédito que permite aplazar el pago de las compras. Su característica es que en lugar de pagar a mes vencido como en una tarjeta de crédito o al contado como en una tarjeta de débito, el saldo gastado se abona a plazos aplicando intereses.
El uso de tarjetas revolving pueden entrañar riesgos severos. Muchos de sus usuarios acaban atrapados por la deuda y pagan unos intereses desorbitados sin que la misma se reduzca.
Sí. En la actualidad existe abundante doctrina y jurisprudencia que avala este tipo de peticiones. A veces, es posible incluso recuperar los intereses de manera extrajudicial.
Antes de aceptar una propuesta del banco o entidad financiera es importante obtener asesoramiento de un abogado especializado en la materia para evitar un acuerdo por el que reciba menos de lo que le coresponde.
¡Sin lugar a dudas! Como los intereses de este tipo de tarjetas son muy altos, una reclamación de los mismos podría sirgnificar que la entidad de crédito le tuviera que devolver (o compensar de su deuda) cantidades que pueden ascender hasta varios miles de euros.
Es imprescindible contar con el contrato de la tarjeta y con el detalle de movimientos de la tarjeta. Con esta documentación se puede realizar un estudio personalizado de su situación, verificar que la tarjeta es efectivamente revolving y calcular las cantidades que son susceptibles de reclamación.
Descubre todas las claves que pueden ayudarte a reclamar los intereses de tu tarjeta revolving y recuperar tu dinero.
Podemos ayudarte a contactar con un abogado de tu zona para que, sin compromiso ninguno, pueda estudiar tu caso y ayudarte a reclamar los intereses a la entidad.